Durante siglos se ha oído hablar del Arca de Noé, y se ha especulado acerca de su existencia o no. La Historia del Arca de Noé pertenece al Antiguo Testamento, es decir, tiene un origen cristiano y data de hace más de 5.000 años. Sin embargo, parece que se han encontrado los restos que verifican que realmente existió.
Qué es el Arca de Noé
El Arca de Noé es un relato bíblico, concretamente del capítulo 6 al 9 del libro del Génesis, en el Antiguo Testamento. En él se cuenta cómo hace más de 5.000 años hubo un diluvio universal que acabaría con todas las criaturas de la Tierra por la maldad que existía.
Por ello, Dios ordenó a Noé que construyera una embarcación en la que pudiera llevar a su que llevara con él a su esposa, a sus hijos Sem, Cam y Jafet, y a sus respectivas mujeres, además de ciertas especies de animales, tanto hembras como machos, para repoblar la Tierra una vez acabara el diluvio. Las palabras que se recogen en la Biblia son: "Porque dentro de siete días haré llover sobre la tierra durante cuarenta días y cuarenta noches, y exterminaré de sobre la faz del suelo todos los seres que hice".
Según cuenta el relato, cuando comenzó a diluviar, todo se cubrió, incluso las montañas más altas, y todas las criaturas murieron, excepto Noé y los que estaban en la embarcación con él.
En la Biblia se dice también que el Arca reposa en el Monte Ararat (actual frontera entre Turquía e Irán), aunque no se especifica dónde.
Encuentran los Restos del Arca de Noé
Esta historia del diluvio universal lleva siglos escuchándose y transmitiéndose de generación en generación. Unos la creen, otros no.
Sin embargo, en el año 1959, un fotógrafo turco que estaba en un avión sobrevolando las montañas del Monte Ararat fotografió un objeto que parecía un barco. Años más tarde, el doctor Brandenburger de la Universidad Estatal de Ohio, recibió las fotografías y las estudió durante el gobierno de Kennedy en Estados Unidos. Tras varios estudios aseguró que “no cabe duda que se trata de un barco sobre la montaña”, lo que despertó el interés de científicos y expertos, que empezaron a investigar.
Ront Wyatt, un arqueólogo aficionado, decidió ir al lugar en concreto en 1977, y empezó a estudiar la estructura encontrada. Entre sus investigaciones se puede destacar que se encuentra a 6.300 metros sobre el nivel del mal, y el mar más cercano está a 200 millas. Además, las medidas del barco coinciden con las que se especifican en la Biblia (“trescientos codos la longitud del arca, de cincuenta codos su anchura, y de treinta codos su altura”).
Continuando con la investigación se encontraron pelos rojos y excrementos de animales, lo que empieza a dejar claro que se trata del Arca de Noé. Además, se demostró que la madera estaba cubierta con resina para que el agua no penetrara. También se han encontrado varias anclas de piedra, tal y como se describe en la Biblia, que Noé utilizó para que el Arca se estabilizara y pudiera quedar estática, mientras las aguas bajaban.
Hoy día se siguen haciendo expediciones y estudios de lo que parece ser el arca de Noé. Las investigaciones más recientes aseguran al 99,9% que realmente los restos encontrados pertenecen exactamente al Arca de Noé de hace 5.000 años.
